
Recostada en su ventana,
la señorita almidonada,
ante todo se incomoda,
pero solo es una mascara.
Ruborizada por nada,
pero se cree mujer liberada,
parloteando sin parar,
cuando algo quiere ocultar.
Niega su amor,
por un caballero encantador,
pero ella misma se delata,
cantándole una balada.
Parece escapada de antaño,
una cursi dama del pasado,
por su mentalidad ridícula
provoca mas de una burla.
Magda Lluna
©Derechos Reservados
Qué más da como se vive el amor, si lo es, es placer para quien lo toma esperando ser correspondido. Me ha gustado el juego de versos y palabras.
ResponderEliminarMi beso
Hola,este verso,reconozco que es un poco de satira,inspirado en alguien real,jejeje,en fin gracias y besos
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