Tú eres la presa y yo el culpable,
de mis ausencias y pesares,
de mis locuras y mis afanes,
al huir de las oportunidades,
que me concedes..
para regresarme y amarte.
Dórigo
Quizá los dos seamos culpables,
tú de alejarte y yo por esperarte,
volaste hacia tus anhelos,
y debo entenderte,
quizá mi amor no basta,
para confortar tu alma bohemia.
Magda
Cuando te escucho,calmas mi furia,
apacientas recuerdos del pasado,
y mis palabras llenas de injuria,
traspasan tu alma de lado a lado,
¡Dios!....
Tú confortada por el sosiego que te inunda,
y yo,un ángel del infierno amargado en su locura.
Dórigo
Mi voz sigue hablándote,
Buscando tú regreso al presente,
Borrando un turbio pasado,
Donde eras tempestad en medio de mi calma.
Magda
Distante de ti,huido...
como la ausencia del perseguido,
cambio el carácter según el viento,
y me enloquece no llegar a tiempo..
para cambiar tú mirada sin hacer ruido,
y amarte en silencio y darte cuido.
Dórigo
Desde tu retiro,
Las brumas reinan en tu mente,
El viento conduce tu ser,
Llevándote en cada momento,
Siento tu lamento desgarrado,
Anhelando reflejarte en mi mirar,
Borrando tanto dolor causado,
Al huir, por no ser capaz de amarme.
Magda
No tengo alma con que consolarte,
ni tengo puerta que pueda abrir,
ni salvación ninguna de mi talante,
solo salvarte...¡lucho por ti!...
Dórigo
Mi consuelo es tú regreso,
Lucharemos juntos en un nuevo comienzo,
Las puertas se abrirán a nuestro paso,
Este amor será bálsamo para las cicatrices de tu alma,
Mi serenidad atraerá esa paz perdida.
Magda
Soledades de mi caracter,
franjas de olvido,
caminos inexpugnables,
sendas de olvido.
Sí,¡sé que te amo!..princesa mia.
Dórigo
Partieron las soledades,
Ese cáracter indomable ,
Transformaste ,vagando en tu ira,
Ahora sabes aquello que tu alma precisa.
Magda
Pero no puedo...
...morir amando es mi consuelo...
Yo soy tú asusencia,
eres mi vida,
..y yo,solo espino...
Dórigo
Me amas,te amo,
pero quizá no baste,
me asusta que solo seas un espejismo,
tiemblo pensando en tenerte y perderte,
te daría mi vida...
pero quizá la perdería,
y prefiero el olvido,
al espino de tú ausencia.
Magda
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