Vuelas en el cielo del olvido
entre las nubes del silencio
una tormenta de sentimientos
liberó de ti mi corazón.
No sabes cuanto te amaba
conservo las tiritas en el alma
aunque el dolor sanó
cuando aquella mujer de ti se burló.
Fui tu muñeca de trapo
me tomabas y dejabas
lo mismo que ella hizo contigo
por eso ahora llamas a mi puerta.
En mi vida para ti no hay lugar
marchaste siguiendo otros pasos
así que date la vuelta en silencio
quiero seguir mi camino en paz.
Magda Lluna
©Derechos reservados
Al menos fuiste muñeca y no estropajo, así tratan muchos hombres a las mujeres. Bien hecho, al diablo con ese cretino!!! Y tu poema, maravilloso, como siempre, mi reina. Me encanta leerte y lo hago cada vez que puedo. Besos, feliz semana.
ResponderEliminarHola Myriam a mi me encantan tus visitas y comentarios,gracias y besos
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